43.000 toneladas del Karst en Yeso de Sorbas se Esfuman
La Destrucción del KYS Continúa
El Espeleo Club Almería Seguirá Denunciando Esta Situación
43.000 toneladas del Karst en Yeso de Sorbas se esfuman
Toda actividad económica siempre ha estado ligada al medio ambiente. No es concebible ninguna actividad que no interactúe de alguna manera con el medio en el que se desarrolla. La ausencia de conciencia ambiental ha sido una de las principales razones que hasta bien entrado el siglo XX los estudiosos de la economía no han abordado en profundidad. Los diversos desastres ecológicos ocasionados por las actividades humanas cada día preocupan más a la sociedad en su conjunto.
Sin embargo, esta esperanzadora tendencia no parece haber calado demasiado el nuestra provincia.
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Hoy hemos sabido que un gran buque carguero ha atracado en el Puerto de Garrucha. La noticia no es el tamaño récord de su eslora o al menos no debería ser así. Esa gran máquina flotante es sólo un engranaje más del monstruo que día trás día carcome las entrañas del Karst en Yeso de Sorbas. Hoy parten a EEUU 43.000 toneladas de yeso. ¿Cuántas han partido ya a todo el mundo? Y, sobretodo, ¿cúantas más estamos dispuestos a exportar?
Hasta cuándo los almerienses dejaremos que el Karst en Yeso de Sorbas, el más importante del mundo, siga eclipsándose en manos de empresas extranjeras. Cierto es que varias familias de Sorbas viven directamente de la minería; pan para hoy y hambre para mañana. Que ocurrirá cuando hayamos destruido el karst y todo el sistema hidrogeológico del Río de Aguas.
En Sorbas se está dando un desastre medio ambiental. No es un terremoto ni un huracán. Se trata de un lento y progresivo cataclísmo del que únicamente nosotros somos responsables.
Ahora está sobre la mesa la renovación de los permisos de explotación minera por otros 30 años. ¿Qué dirán nuestros representantes políticos?
El Espeleo Club Almería dice NO.
